Bocas del Toro: Hermosas Playas, Variada Fauna y Buenas Olas

Partimos en un auto alquilado desde el aeropuerto de Tucumén – Ciudad de Panamá hacia el archipielago de Bocas del Toro. Viajamos toda la noche, primero hacia el norte por la carretera panamericana para luego adentrarnos a la altura de Chiriquí. Cruzamos la accidentada carretera que atraviesa la Reserva Forestal de Fortuna hasta Chiriquí Grande, en este punto nos desviamos nuevamente hacia el norte para recorrer los últimos 70 kilómetros, bordeando el mar caribe, que nos separaban de nuestro destino final. Fueron 500 larguísimos kilómetros entre Ciudad de Panamá de Bocas del Toro.

Hermosas Playas Adornan el Litoral de Bocas del Toro

Partimos a las 10 pm y llegamos al pueblo de Almirante bordeando las 6 y 30 am luego de lidiar con un sinuoso y montañoso camino, venciendo a la noche, la neblina y sobretodo al sueño.

Esperamos en la fila del ferry para pasar el auto a la Isla de Colón, la principal isla del archipiélago de Bocas del Toro. La espera fue en vano, como nos encontrábamos en vísperas del año nuevo el ferry estaba full. Parqueamos el auto en una cochera y cruzamos, en solo 25 minutos y por 4 dólares por cabeza, en un "water taxi" hasta el pueblo de Bocas del Toro, capital de la provincia que lleva el mismo nombre. Minutos antes de llegar ya divisábamos la costa de la isla, adornada por un mar turquesa y coloridas casas construidas sobre pilares en el agua.

Parte del Pueblo de Bocas del Toro visto desde el mar

La provincia de Bocas del Toro se encuentra al noroeste de Panamá muy cerca de la frontera con Costa Rica. El nombre poco común se lo da una inmensa roca en forma de toro que se encuentra en medio del mar, a las afueras de la isla. Las principales islas que forman el archipiélago son Colón, Popa, bastimentos, Cristóbal, Cayó de Agua y Cayó Carenero.

Playa Red Frog en Isla Bastimentos

Ya en tierra firme tomamos un taxi hacia nuestro hotel, Tesoro Escondido, el cual habíamos reservado desde Lima. Lo poco que vimos en el corto trayecto del pueblo al hotel nos impresionó. Bellas playas, mar azul, verdes palmeras y grupos de surfers esperando la ola perfecta fueron la primera radiografía que tuvimos del lugar.

El surf es una de las atracciones principales del archipiélago

En el hotel nos recibió Monique, la dueña del Tesoro Escondido, una simpática suiza que llegó por primera vez a Bocas del Toro hace mas de 15 años y se quedo enamorada del lugar.

Charo y Monique, propietaria del hotel Tesoro Escondido

El Tesoro Escondido, ubicado a 10 kilómetros del pueblo de Bocas del Toro, es el lugar ideal para descansar. Sus rusticas y acogedoras cabañas se mimetizan con la vegetación, varias de ellas cuentan con amplias terrazas frente al mar. La atención es de primera, y la amabilidad de Monique hace que la estadía sea de los mas grata.

Cabaña dentro del hotel Tesoro Escondido

Charo y yo nos ubicamos en la cabaña La Tortuga; Sven y Matty en la Libélula. Apenas tocamos la almohada caímos y dormimos profundamente, teníamos que recuperar el sueño perdido.

En 1502 Cristóbal Colón, cuando realizaba su cuarto y último viaje hacia esta parte del globo terráqueo, ancló sus naves en las tranquilas aguas del archipiélago de Bocas del Toro, habitadas por esos años por indígenas Ngobe, Teribe y Bokota.

Colorida fachada en el pueblo de Bocas

Posteriormente los piratas ingleses encontraron en Bocas del Toro un sitio perfecto y seguro para descansar y planear sus próximas fechorías. Mas tarde, en el siglo XIX, Bocas del Toro se convirtió en un dinámico centro comercial de mercadeo de bananos y cacao. Los inmigrantes, en su mayoría provenientes de Jamaica, convirtieron a Bocas del Toro en una provincia angloparlante dentro de un país de habla hispana.

El mar caribe baña las costas del archipiélago

A principios del siglo XX Bocas del Toro tenía cerca de 25,000 habitantes y vivía un auge económico gracias al comercio del Banano, lamentablemente alrededor de 1930 una plaga atacó las plantaciones de este fruto acabando absolutamente con todas las plantaciones de banano en la isla.

Matty y Sven en las calles de Bocas del Toro

En pleno siglo XXI Bocas esta viviendo un nuevo auge gracias al turismo y a los bienes raíces. Norteamericanos y europeos están adquiriendo tierras en esta isla con el fin de construir y vivir en esta parte de Centroamérica lo activa la economía del lugar, sumando los visitantes que llegan cada vez mas seguido a conocer esta maravilla caribeña.

Mapa donde indica la ubicación de Bocas del Toro en Panamá

Despertamos de la obligada siesta bordeando las 3 pm, nos enfundamos nuestras ropas de baños, cogimos nuestras toallas y salimos a conocer Bluff, una hermosa playa adornada con arena color chocolate y palmeras a solo 5 minutos a pie desde el hotel. 

Playa Bluff

Disfrutamos del mar, aunque estaba un poco movido y tenia bastante corriente, tomamos un poco de sol y antes que caiga la tarde caminamos unos 30 minutos hacia el norte hasta llegar a un pequeño restaurante donde nos atendió una amable pareja de belgas. Tomamos unas cerveza, comimos algo ligero y regresamos, ya de noche y por donde vinimos, con destino al hotel Tesoro Escondido.

Disfrutando unas cervezas

Bocas del Toro es uno de los principales atractivos turísticos de Panamá, sus hermosas playas, sus aguas cristalinas ideales para el buceo, su variada flora y fauna y sus olas para la practica del surf atraen a miles de visitantes todos los años.

La fauna es muy variada dentro de las islas

Nuestra visita al archipielago de Bocas del Toro recién empezaba, nos quedaban cuatro días para descubrir todas las maravillas naturales que nos regala esta parte del continente Centroamericano.

Clásica cerveza Panamá