lunes, 13 de mayo de 2013

Cascada “La Escondida”, Perdida entre las Montañas del Rincón de la Vieja (P1)


Salimos de Playa Negra con destino al volcán “El Rincón de la Vieja”, previa parada por la ciudad de Liberia. Nos debíamos un merecido desayuno a base de “Gallo Pinto” (arroz y frejoles), plato tradicional que nunca falta en la primera merienda de cualquier ciudadano costarricense.

Cascada "La Escondida"
Llegamos al Parque Nacional Rincón de la Vieja dos horas después. Nuestra intención era subir a la punta del volcán, misión que tuvimos que desistir debido que el acceso está cerrado hace mas de un año, el motivo, el volcán esta en constante actividad y se torna peligroso para el visitante.

Santiago desayunando "Gallo Pinto"
El Parque Nacional Volcán Rincón de la Vieja tiene un extensión de 14,300 Ha, esta ubicado en las provincias costarricenses de Guanacaste y Alajuela. Se encuentra dividido en dos sectores: Las Pailas y Santa María; ambos sectores tienen atractivos muy particulares, debido a la importancia de sus ecosistemas, en los cuales sobresalen la actividad volcánica.

Toma aerea del Volcán "Rincón de la Vieja" (foto: Internet)
Este parque nacional, es un macizo volcánico con nueve cráteres, que forma parte de la línea divisoria de aguas, entre el Caribe y el Pacífico, de la zona noroeste del país y protege las 32 nacientes de ríos que la conforman.

Gonzalo camino a "La Escondida"
La idea era pasar dos días en el parque. Lo primero que hicimos fue caminar hacia la cascada “La Escondida”, ubicada a casi 4.5 kilómetros de la entrada al parque. Los primeros 2 kilómetros y medio son sencillos, pequeñas subidas y bajadas bajo la sombra de un gran bosque primario. En la cima de los árboles observaban nuestros pasos tres grupo monos, los araña, los aulladores y uno que otro capuchino cara blanca.

Mono Araña
Luego de la primera mitad el camino se bifurca y comienza la parte dura del recorrido. La sombra de los arboles desaparece, la trocha de alrededor de dos kilómetros deja de ser marcada y se inclina varios grados bajo el candente sol norteño de Costa Rica. Los vientos huracanados con las justas nos dejaban avanzar.

Empinada y ventarrosa subida a "La Escondida"
Luego de un gran esfuerzo llegamos a la cima y bajamos unos 300 mts por un camino enlodado y accidentado. Nos topamos con una hermosa quebrada en la parte alta de una gran cascada, en un principio pensamos que habíamos llegado a “La Escondida”, pero al investigar y darnos cuenta que no había forma de bajar decidimos seguir explorando por si estábamos equivocados.

Primera cascada que encontramos en el camino
Debido a que no está bien marcada la ruta y no es un destino tan visitado dentro del Parque Nacional, mucha gente no llega nunca a la cascada y se queda en esta primera creyendo que es “La Escondida”
Encontramos un pequeño camino, bordeamos una de las laderas de la quebrada y a los pocos metros nos topamos con la hermosa cascada de “La Escondida”, de cerca de 20 mts de alto, luego de 1 hora y 50 minutos de trayecto.

Cascada "La Escondida"
Sin pensarlo dos veces nos quitamos la camisa, los zapatos y saltamos a chapotear en la pequeña laguna donde cae el agua de la cascada. Utilizamos algunas piedras aledañas como trampolines naturales, nos bañamos y buceamos en sus cristalinas aguas, pasamos mas de una hora de pura diversión. Todo ese rato solo estuvimos nosotros, la cascada fue nuestra, que mas podíamos pedir.

Afelinado salto de José
Buceando al pie de la cascada
Retornamos a paso ligero, queríamos visitar la cascada “La Cangreja”, la mas bonita del Rincón de la Vieja, pero el tiempo nos ganó. Resignados regresamos a la entrada del parque y dejamos la excursión a la mencionada cascada para el día siguiente.

José disfrutando de "La Escondida"
Conseguimos un hospedaje en las cercanías y nos fuimos a dormir, en la mañana recorreríamos el sector de “Las Pailas” y luego andaríamos los 5 kilómetros que nos separan de la catarata “La Cangreja”, nos esperaba un nuevo día lleno de aventuras y emociones en el Rincón de la Vieja.

Disfrutando a mil la naturaleza
Pocos minutos antes de llegar a la cascada


2 comentarios:

  1. No dejes de fotografiar el mundo que lo que haces es maravilloso, saludos.

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  2. Muchas gracias Paco, comentarios como los tuyos me inspiran a seguir viajando y fotografiando.
    un abrazo

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