jueves, 7 de abril de 2011

De Cuzco a Chalhuanca: Tarawasi, Saywite y el Gran Río del Apurimac

Partimos desde el Cuzco alrededor de las 9 am, aún andábamos cansados del trajín de los días anteriores estábamos entrando a la recta final de nuestro viaje por Arequipa, El Colca, Machu Picchu, Cuzco, Apurimac y Nazca
Salimos del Cuzco por la carretera que nos lleva al pueblo de Urubamba, a los pocos kilómetros llegamos a Anta y ahí tomamos el desvío hacia Abancay, capital del departamento de Apurimac.

Complejo Arqueológico de Tarawasi

Comenzamos a devorar kilómetro tras kilómetro y curva tras curva de esta serpenteante carretera que desciende hasta el río Limatambo. Luego de hora y media llegamos al conjunto arqueológico de Tarawasi, complejo ubicado a 2675 msnm se encuentra a 76 kilómetros del Cuzco.
Tarawasi es una palabra compuesta quechua, viene de “tara” un arbusto espinoso que da frutos en vainitas tipo arvejas, y “wasi” que significa casa.

Puertas trapezoidales adornan el muro de este complejo arqueológico

El conjunto arqueológico de Tarawasi, es considerado como un centro ceremonial inca, ubicado en el tramo principal al Chinchaysuyo, edificado con piedra andesita, tallada y pulida en forma muy fina
Tarawasi presenta dos terrazas superpuestas: la primera esta formada por tres paredes, una frontal y dos laterales, hacia la espalda no hay pared debido que está pegada hacia un cerro, estas están decoradas con varias ventanas equidistantes y de forma trapezoidal. La pared central esta tendida en sentido este-oeste, con una longitud de 100 mts compuesta por piedras milimétricamente encajadas

Pared de piedra en Tarawasi

Estuvimos cerca de 45 minutos recorriendo este complejo arqueológico muy bien conservado, poco conocido y poco visitado, el cual encontramos casi por casualidad al lado del camino.
Continuamos nuestra ruta, y entramos al departamento de Apurimac, en un principio la carretera desciende hasta cruzar el río Apurimac, para luego acender por la ladera de una montaña regalándonos un hermoso paisaje del valle, es imposible no detenerse mas de una vez a contemplar esta maravilla de la naturaleza.

El río Apurimac

Después de un par de horas mas de camino llegamos al pueblo de Carahuasi, ahí vimos un letrero que indicaba un desvío hacia el mirador del cañón del río Apurimac. Afanosamente tomamos dicho desvío, no había mucha gente en la ruta para preguntar, al final terminamos tan confundidos y enredados entre tanto camino y camino que nunca llegamos al mirador, en un punto la pista simplemente se acabo. Como el tiempo no nos sobraba regresamos hacia la carretera a continuar con nuestra ruta.
Seguimos ascendiendo por estos hermosos paisajes con grandes montañas y verdes bosques andinos, estábamos maravillados por la belleza de la ruta. Unos minutos después de pasar Carahuasi llegamos al Complejo de Saywite, a 3500 msnm, en el cual resalta el famoso monolito de Saywite, un gran bloque de granito de once metros de circunferencia, cuatro de diámetro y casi dos y medio de alto, adornado en su mitad superior con una serie de complejas y misteriosas figuras.

Monolito de Saywite en el departamento de Apurimac

Representa a escala el mapa del Tahuantinsuyo y posee mas de doscientas figuras en relieve de la flora, fauna, topografía y costumbres de la época del imperio incaico.
Se desconoce qué uso se le daba, pero estando en un centro ceremonial lo mas probable es que tuviera un significado religioso, o quizá una representación simbólica del universo o, como sostiene el Dr. Federico Kauffman Doig, estuviese relacionado con el culto del agua.

Detalle labrado en la Monolito de Saywite

Pocos metros mas adelante nos topamos con un pequeño complejo arqueológico el cual se caracteriza por sus pequeños pasajes, escaleras y por la hermosa vista del valle que nos regala de la parte mas alta.

Complejo arqueológico de Saywite

Seguimos nuestro camino junto a dos niños que nos pidieron que le diéramos un aventón hasta su casa, ubicada a 10 minutos Saywite. La casa de estos dos niños, donde los esperaba su madre, se encontraba exactamente a la altura del desvío al pueblo de Cachora, conocido por ser el punto de partida para caminar dos días hacia las famosas ruinas de Choquequirao.
Continuando nuestra ruta descendimos hacia el pueblo de Abancay donde paramos a echar combustible, continuamos por mas de una hora hacia Chalhuanca, junto a Charo decidimos no parar mas, ya nos estaba ganando el tiempo y andábamos un poco cansados y con hambre.

Plaza de Armas de Abancay

Llegamos a las 4 y 30 pm al hotel Tampumayu, 20 kilómetros antes de llegar Chalhuanca, luego de recorrer 305 kilómetros en 6 y media horas (con paradas incluidas). Este hotel se encuentra en medio de la nada, tiene la apariencia de ser un pequeño pueblito serrano, cuanta con algunas cabañas y una placita con pileta y capilla incluida.

Plazoleta y capilla en el Hotel Tampumayu - Chalhuanca

Piedras en el río Chalhuanca

Éramos los únicos huéspedes del hotel, luego de instalarnos, baje caminando unos diez minutos hasta la rivera del río Chalhuanca a tomar unas fotos. Al caer la noche comimos algo ligero y nos fuimos a dormir, el día siguiente iba a ser el mas largo y agotador de todos, debíamos llegar a Lima, pero antes nos planteamos tomar un desvío para visitar la parte alta del pueblo de Sañayca.


Video de la Ruta Cuzco - Nazca

2 comentarios:

  1. Arturo, para mi eres uno de los MEJORES FOTOGRAFOS del Perú. Te admiro mucho y me encantan TOODOS tus trabajos. sigue asi! Felicitaciones!!!!

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  2. Muchisimas gracias por esas palabras solo hacen que siga adelante con esta pasión,
    Saludos

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