martes, 24 de septiembre de 2013

Pucará: Tierra de Simpáticos y Tradicionales “Toritos”


Salimos de el hermoso “Cañón de Tinajani” bordeando las 11 de la mañana con dirección a Juliaca. No queríamos dejar de visitar el pueblo de Pucará, el cual se encuentra al borde de la carretera y es famoso por sus simpáticos “Toritos de Pucará”.

"Toritos de Pucará"
Luego de 50 km llegamos. La primera parada fue una plaza aledaña a la Plaza de Armas donde era evidente que habíamos llegado a nuestro destino. Nos dieron la bienvenida 3 enormes y coloridos “Toros de Pucará” los cuales adornaban la plaza.

Gran "Torito de Pucará" en Plaza

Andamos un par de cuadras mas y llegamos a la Plaza de Armas donde luce, en uno de sus cuatro lados, la iglesia de Santa Isabel de Pucará. Esta hermosa iglesia, de estilo barroco, fue construida por misioneros jesuitas en el año 1767.

Iglesia de Santa Isabel de Pucará

La fama mundial que ha ganado el Pueblo de Pucará es gracias a sus simpáticos “toritos” los cuales no fueron precisamente creados en este lugar. En la época precolombina artesanos de la comunidad de Cheqa Pupuja fabricaban diversas piezas de cerámica para los conquistadores españoles asentados en el sur del Perú colonial, una de esas piezas fueron los mencionados “toritos”.

Detalle de "torito" sobre el fondo de la pared de la iglesia

Los “toritos” adoptaron el nombre del pueblo de Pucará debido a que por este lugar, en aquellos tiempos, pasaba el tren, lo que volvió al poblado el principal centro de comercialización de esta peculiar y a la vez clásica artesanía.

Pueblo de Pucará visto desde
los restos arqueológicos de Kalasaya

Se cuenta que el curioso “torito” apareció en escena gracias a una antigua fiesta religiosa española en la cual se adornaba un toro vivo con flores y lazos, de ahí surge la decoración de la cerámica con rosetones y círculos alegóricos en el pecho. Se le hacia incisiones en la frente y en el cuerpo utilizando su sangre, mezclada con chicha, como ofrenda a la pachamama (madre tierra). A ello se debe que se representa al torito con la lengua afuera lamiendo la sangre, la cola enroscada representado su fuerza y el vigor.

Posando con "Torito" de gran tamaño

Hoy en día, el “Torito de Pucará”, es un símbolo de suerte y prosperidad, tanto en la marcación de ganado (como símbolo de procreación de los rebaños), la felicidad de los matrimonios, la fertilidad de los hogares y el cuidado de las casas. Es por ello que lo encontramos sobre los techos de las casas, en muros, portones y diversos lugares en gran parte de la serranía sureña del Perú.

Los "Toritos de Pucará" traen suerte a las casas y al matrimonio

Luego de largos minutos en la Plaza de Armas avanzamos unos cuadras hasta llegar al el taller de un artesano fabricante de “toritos” donde, amablemente, el artista nos contó y mostró como los producía. El primer paso es poner la arcilla en  moldes de diversos tamaños, luego los introduce en un horno entre los 800° C a 900° C por 24 horas. Una vez horneados se le hacen algunos acabados, luego son decorados y pintados para terminar, nuevamente, en el horno por 4 o 5 horas mas.

Artesano de Pucará

Después de observar como hacían por decenas los “Toritos de Pucará” partimos hacia la parte alta del pueblo, queríamos visitar el complejo arqueológico de Kalasaya o Pucará antes de partir.

"Toritos" secando al sol

Kalasaya fue edificada alrededor del año 200 a.C. por antiguos pobladores del altiplano del Titicaca. Destacan dos tipos de arquitectura dentro del complejo, una de características monumentales, de probable función ceremonial, y otra rústica y simple las que se cree que fueron viviendas.

Restos arqueológicos de Kalasaya

Dentro de Kalasaya encontramos 3 plazas hundidas en forma de herradura y construidas con piedras de color rojo y blanco. Asimismo en el lugar se ubican 4 cámaras funerarias que contenían restos humanos junto a objetos de oro y plata.

Kalasaya data del año 200 a.C.

Las evidencias dejadas por los Pucará son típicas e inconfundibles donde destaca en trabajo en piedra y cerámica que representan seres mitológicos muy estilizados con motivos geométricos e imágenes estelares y terrenales como sapos, lagartos y serpientes.

"Toritos de Pucará" junto a torreón de la
iglesia de Santa Isabel

Salimos de los restos arqueológicos de Kalasaya con dirección a Lampa no sin antes comprar unos “Toritos de Pucará” de recuerdo y de comernos un exquisito “Kankacho de Ayaviri”. El día se nos iba acortando y aún nos faltaba visitar el hermoso pueblo de Lampa, conocido como “La Ciudad Rosada” o “Ciudad de las 7 Maravillas”.

No puedo negar que valoro mucho más al “Torito de Pucará” que hoy adorna la sala de mi casa.

Moldes de 'toritos" en casa de artesano

domingo, 8 de septiembre de 2013

Isla de Taquile: Tradiciones y Costumbres del Incanato a Nuestros Días


Luego de una grata visita a Los Uros llegamos a la Isla de Taquile, era la segunda vez que la visitaba. La primera fue hace 15 años, en 1998, cuando me lleve un grato recuerdo de este bello lugar bañado por las aguas del Lago Titicaca.

Pobladora Taquileña
Arribamos por un puerto secundario, la ventaja de este es que la trepada hacia el pueblo no es tan pronunciada, aunque no deja de ser pesada. Por el puerto principal hay que subir agotadores 533 escalones sobre los 3800 msnm, con un desnivel de 140 mts.

Parte de los 533 escalones que van
del puerto principal al pueblo
La Isla de Taquile es única en el mundo, las tradiciones y costumbres de la población son las misma que hace centenas de años. Taquile se encuentra a 35 km al este de la ciudad de Puno, su longitud máxima es de 5.5 km de largo por 1.5 km de ancho y está entre los 3810 y los 3950 msnm.

La isla está habitada por cerca de 2000 comuneros
Es la isla mas grande del lado peruano en el Lago Titicaca, superada solamente por la Isla del Sol en Bolivia. Su población bordea los 2000 habitantes, distribuidas en 365 familias, a los que se les conoce como “taquileños”. Hablan español y quechua, lengua que heredaron de sus ancestros. En la parte alta de la isla encontramos vestigios incas y pre incas bastante deteriorados.

Parte de sus costumbres vienen de
la época de los incas
En la conquista española la isla fue adjudicada al español Pedro Gonzáles, desde entonces, esta bella isla, paso por varias manos mientras que sus población autóctona trabajaba bajo las ordenes de los conquistadores.

Parte alta de la Isla de Taquile 
En el año de 1937 sucedió un hecho singular, los antiguos pobladores de Taquile comenzaron a comprar poco a poco las tierras que les pertenecieron a sus ancestros y durante los siguientes 30 años lo continuaron haciendo. Finalmente la isla, luego de cuatro siglos, volvió en su totalidad a sus antiguos dueños.

Taquile tiene 5.5 km de ancho por 1.5 km de largo
En la actualidad, Taquile, es una comunidad autónoma y funciona de una manera muy organizada. La sociedad taquileña está basada en el trabajo colectivo donde rige hasta hoy el antiguo código moral inca "ama sua, ama llulla, ama qhella" (no robaras, no mentiras y no serás perezoso).

Mujeres en la Plaza de Armas
Aún en Taquile se utiliza el “trueque”. Su economía se basa en la pesca, agricultura (la papa) y principalmente en el turismo. Es curioso que en la isla no existen policías, simplemente porque no se comenten delitos mayores. La tranquilidad, la paz y el silencio son totales en un lugar como este, donde no existen carreteras ni vehículos motorizados, donde todas las rutas son peatonales. Además la presencia de autoridades estatales es casi nula. Cuando se presenta algún problema lo resuelven en las asambleas de los domingos. Otro dato curioso es que en la isla no existen los perros, piensan que estos animales malogran las tierras de cultivo.

Hasta ahora en la isla de practica el sirwinaku (convivencia)
antes del matrimonio
En la isla el matrimonio es para toda la vida, no existe el divorcio. Para evitar confusiones y estar seguros de casarse con alguien para siempre practican el “sirwinaku" (convivencia). De esa manera la pareja convive el tiempo que sea necesario para conocerse completamente antes de dar el paso definitivo hacia el matrimonio. Eso si, de tener la pareja un hijo están en la obligación de casarse inmediatamente.

Chullo que identifica como autoridad a este poblador de la isla
Las autoridades locales llevan puesto un colorido chullo con orejeras donde destacan los colores naranjas. Los hombres de la isla portan un chullo, que ellos mismos tejen, el que revela su estado civil. Los solteros utilizan uno con la mitad inferior de color rojo y la mitad superior blanca, mientras que en los hombres casados el chullo es todo rojo.

El chullo con blanco identifica a los hombres solteros,
el de color a los casados
Además los casados llevan colgada una “chuspa” o bolsa de tela tejida atada a la cintura donde guardan las hojas de coca. Es curioso observar el ritual de saludo que utilizan los lugareños, al toparse, antes de dirigirse palabra alguna, intercambian un puñado de hojas de coca, de “chuspa” a “chuspa”. Luego de ese ritual empieza la conversación.

Mujeres tapadas por su "chuko"
En el caso de las mujeres, las casadas llevan un capa o “chuko” de color negro con una borla multicolor en las cuatro puntas. Las borlas, en el caso de las solteras, son de mayor tamaño, además de utilizarlas para taparse y así evitar muchos coqueteos y miradas indiscretas de los hombres solteros de la comunidad.

La mujer en Taquile no puede ser autoridad
pero si tiene derecho a voto en la comunidad
Las leyes sociales, en lo referente a la relación hombre – mujer, son curiosas y bastante machistas. La mujer debe caminar siempre detrás del hombre y ninguno de los dos puede mostrar afecto delante de gente. La mujer no puede ser autoridad en el pueblo pero si tiene derecho a vota en las asambleas.

Poblador Taquileño
Luego de un empinado ascenso llegamos a la plaza de armas de Taquile, el calendario marcaba 28 de julio, fiestas patrias del Perú. Por ellos nos encontramos con un gran y colorido desfile, el cual disfrutamos a plenitud. Almorzamos una sabrosa trucha con arroz y partimos hacia el otro lado de la isla. Desde la parte alta se tiene la mejor vista de Taquile, a un lado observamos el pueblo con el fondo de parte de la cordillera de los andes del lado boliviano, al otro lado, el puerto principal.

Vista de la isla con el fondo del lago
y de la cordillera del lado boliviano
Descendimos los 533 peldaños hacia el puerto, cruzamos los tres arcos y terrazas incaicas que adornan el empinado camino. Llegamos la embarcación y partimos con destino a Puno, a 3 horas de viaje.

Mujeres preparándose para desfilar por fiestas patrias
Fue un placer volver luego de 15 años a este magnifico lugar, lo encontré algo cambiado, el uso de celulares y tablets es cada vez mas común en la población. Aún sus costumbres y tradiciones siguen intactas a pesar del gran aumento de turistas, los que se han incrementado en gran cantidad durante los últimos años.

Arco incaico camino al puerto
Llegamos a Puno al atardecer, nos dimos un buen baño caliente, comimos algo y nos fuimos a dormir, aún nos quedaba un día mas para recorrer la parte norte de Puno las que nos regalaría, a la postre, muchas agradables sorpresas.

Hermosa vista desde la parte alta de la isla
Mujer Taquileña
Hombre Taquileño
Niños Taquileños
Foto tomada en 1998 durante mi primera visita a Taquile

martes, 3 de septiembre de 2013

Los Uros: Milenarios Habitantes Flotantes del Lago Titicaca


Partimos del puerto de la ciudad de Puno bordeando las 7 y 30 am. Nuestro destino, una de las mas de 30 islas flotantes que se encuentran sobre las aguas del Lago Titicaca, el lago navegable mas alto del mundo (3,812 msnm).

Artesana en Isla de los Uros
Luego de una hora surcando las aguas del lago llegamos a nuestro destino. En la isla, amablemente, nos recibió parte de su población. Descendimos sobre la isla de totora, esta es textualmente el piso en la isla. Al pisarla se mueve como si estuvieras sobre un colchón de agua, una sensación rara pero agradable.

Existen cerca de 40 de estas islas en el Titicaca
El origen de Los Uros se remonta a épocas anteriores al imperio incaico. Hay estudios que sostienen que su población proviene de una migración desde la polinesia y que forman un grupo humano distinto al que fue ocupando paulatinamente América del Sur durante miles de años.

Cada isla es habitada por alrededor
de 50 personas
El grupo étnico, diferente a los quechuas y aymaras, se denomina “kot-suña”, quienes antiguamente hablaban el pukina, idioma que perdió vigencia con el paso de los años.

Haciendo fotos en la isla
Se cree que el primer lugar que habitaron los Uros fue en los alrededores del Lago Uro – Uro, ubicado actualmente en territorio boliviano. Luego, al ser amenazados por los conquistadores incas, huyeron en sus balsas de totora hacia el interior del Lago Titicaca. Se dice que vivieron muchos años dentro de sus embarcaciones hasta que fabricaron estas impresionantes islas flotantes en las cuales viven hasta el día de hoy.

Bote de totora
Con el tiempo la población fue perdiendo la pureza étnica, mezclándose con los quechas y aymaras, habitantes de las orillas del Lago Titicaca. Hoy en día los habitantes de estas islas practican parte de sus tradiciones ancestrales, las cuales tienen una significativa influencia aymara.

Los pobladores viven sobretodo del turismo
En la actualidad existen cerca de 40 islas flotantes en el Titicaca, cada una de ellas habitadas por alrededor de 50 personas, siendo las Uros Chulluni la mas grande de ellas. El número de islas va variando de acuerdo al crecimiento demográfico. Al crecer las familias o al decidir separarse, muchos forman su propia isla.

Niña la pie de su vivienda
Leyendas urbanas cuentan que las islas de los Uros flotan mágicamente gracias a la bendición de los dioses, si embrago la realidad es que estas maravillosas islas flotan debido a que son construidas sobre bloques de raíces de totora que, al entrar en descomposición, producen gases, los que ayudan a la flotación de las islas.

Las islas son construidas solo de totora
Por encima de estos bloque de raíces, los Uros colocan gran cantidad de totora seca sobre la cual construyen sus pequeñas casas con el mismo material. Cada cierto tiempo (1 o 2 meses) deben echar mas totora sobre la anterior para evitar la desintegración de la isla.

Niño de la isla
Las islas flotantes construidas son ancladas al fondo del lago por medio de grandes palos que van desde el fondo hasta la base de la isla. La mayoría de estas se encuentran dentro de la Reserva Nacional del Lago Titicaca.

Poblador de Los Uros
Los hombres Uros son hábiles constructores y conductores de balsas de totora y las mujeres son expertas tejedoras. Hoy en día están muy enfocados al turismo y al venderle artesanías a los que tienen el gusto de visitarlos. Además del turismo, se dedican a la pesca artesanal y a la caza de aves silvestres.

Ave del totoral
Gran parte de las islas tienen luz gracias a una donación de paneles solares que hizo el gobierno del ex presidente Fujimori. Han habido muchos casos de incendios debido a lo inflamable de la totora, es por ellos que las familias cocinan fuera de sus casas y manejan el fuego con mucho cuidado

Cocina Típica
Permanecimos cerca de una hora sobre la totora de los Uros, un miembro de la población nos explicó detalladamente como construyen las islas y como las anclan al fondo del lago.

Artesana 
Tomamos algunas fotos y nos despedimos de la población. Continuamos nuestro camino hacia a la Isla de Taquile, era 28 de julio, fiesta nacional del Perú, nos esperaba un colorido día de celebración patria en nuestra siguiente parada.

Parado en la isla flotante

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